El CEDMA recalca que la DATE confirma que la inundabilidad es el talón de Aquiles de la futura ordenación territorial dianense

 

No es la primera vez que desde el Cercle Empresarial de la Marina Alta nos vemos obligados a insistir en la importancia de declarar Dénia como municipio inundable. Pero en esta ocasión, esperamos que la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Dénia sea capaz de tomarse en serio y en este sentido la Declaración Ambiental y Territorial Estratégica (DATE) del Plan General Estructural emitida por la Dirección General de Medi Natural i d’Avaluació Ambiental.

Reunida la Comisión de Territorio de CEDMA esta semana y tras un riguroso análisis por parte de los técnicos y profesionales que la conforman, resulta inapelable afirmar que la DATE confirma que la inundabilidad es el talón de Aquiles de la futura ordenación territorial dianense. Es más, gran parte de los muchísimos condicionantes advertidos en el documento, se deben precisamente a esta causa, por lo que desde CEDMA seguimos sin comprender los motivos municipales para obviar la recomendación realizada en su día al respecto por parte del Servicio de Ordenación del Territorio de la Generalitat.

Quizá, sospechamos, esta resistencia sea debida a que muchos de los concejales que conforman el actual ejecutivo dianense votaron en contra de la declaración de municipio inundable cuando estaban en la oposición, impidiendo así la toma de medidas correctoras. Si es este el motivo, rogamos que se quiten de encima complejos y errores pasados, y asuman la responsabilidad que tienen como representantes públicos de la ciudad.

Punto y aparte merece el Plan Director de Saneamiento al que refiere la DATE, su estado de abandono crónico que ahora habrá que retomar, así como la necesidad de considerar que la conexión al alcantarillado de miles de viviendas del Montgó y Rotes, no será solución suficiente sin aportar medidas de redimensionamiento al sistema de impulsión y una nueva EDAR.

Mucho tiene que cambiar este plan general planteado en 2019, versión que por otra parte y como ya señalamos en su día, carece de la necesaria exposición pública y de cualquier intento de apoyar su viabilidad económica. Esta DATE, en realidad, es un hito histórico por sorprendente, ya que sus 52 páginas suponen de facto el sistemático recordatorio del acusado incumplimiento de los múltiples informes sectoriales que aún siguen siendo desfavorables al planeamiento propuesto desde el departamento de Urbanismo de Dénia.

La DATE, si es tomada en serio, debería provocar de la introducción de cambios sustanciales en el modelo propuesto por el Ayuntamiento, y por ello quedan muchas dudas en el aire. Dado que los condicionantes tanto en las materias anteriormente citadas como en muchos otros puntos son tan exigentes, ¿provocará esto una nueva exposición pública? Y en caso de no llevarse a cabo ¿qué garantías jurídicas existen de que no será tumbado de nuevo en los tribunales a causa precisamente de un nuevo fallo procedimental?

Porque la DATE, en definitiva, considera el modelo propuesto aceptable, pero marca tantos condicionantes que difícilmente se pueden cumplir sin realizar un PGE muy distinto del
actualmente propuesto.

La situación actual es de fase previa a la declaración. Al ser una declaración ambiental “no definitiva”, como el mismo documento señala, no hemos avanzado absolutamente nada
y estamos, lamentablemente, en el mismo lugar que hace cuatro años.

Por estos motivos, desde CEDMA, se tiene previsto requerir oficialmente la convocatoria del Consell de Urbanismo de Dénia para conocer los pasos que el Ayuntamiento va a dar a fin de solventar la situación. Al mismo tiempo, y para abordar las dudas que genera esta DATE, se va a pedir también una reunión en la Dirección General de Urbanismo.

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