L’escaldà y el Patrimonio de la ruta dels Riuraus brilló en Valencia
La promoción cultural y turística de Jesús Pobre y la ruta dels riuraus en la emblemática Plaza de la Mare de Deu en Valencia ha recibido cientos de visitantes.
L´Escaldá y los riuraus ha vuelto a la memoria colectiva de la capital del Turia
Como estaba previsto y gestionado con el Ayuntamiento de Valencia, l´Escaldá de Jesús Pobre y la ruta dels riuraus desembarcó en la plaza de la Mare de Deu de Valencia ayer domingo.
En concreto, se instaló un stand con los elementos de l´escaldá, bibliografía de riuralogía y otras publicaciones en la materia, así como 600 bolsas de pasas y mistela para degustación, material promocional de Jesús Pobre y de los 16 integrantes de la ruta dels riuraus, un taller de llata realizado por vecinas de la entidad local menor, el grup de danses de Jesús Pobre y la Colla de La Xareta.
En el entorno de la plaza se instalaron 12 cañizos, formando 6 puntos expositivos de fotografías sobre el paisajismo agrícola y el proceso de escaldado, así como la oferta cultural de cada uno de los 16 pueblos que componen la ruta dels riuraus.
Desde las 10:00h. hasta las 13:30h, cientos de personas se acercaron a la exposición, solicitaron información sobre el proceso de l´escaldá y la ruta dels riuraus, contando con la colaboración de Lluis Fornes El Siforner y grupo melic que informaban de todo el proceso, y además disfrutaron de les danses tradicionals y el taller de llata.
Destacó en el evento un gran numero de personas que conocían l´escaldá por referencias de sus generaciones pasadas, pero que no habían tenido la oportunidad de poder conocerla hasta ahora. Además de amigos y amigas, acudió el presidente de la asociación de riuraus vius, los propietarios del riurau más grande del mundo, el de Massarrojos, representantes de asociaciones culturales valencianas que nos felicitaron por esta iniciativa, traer la cultura del moscatel y la pasa al mismo centro de Valencia, fotografiando residentes y turistas una estampa del pasado que vuelve a ser presente.
Al cierre del envento promocional se había agotado el material promocional, la mistela y las pasas para degustación, generando a su vez estampas y audiovisuales de lo que se vivió en la emblemática plaza, así como reiteradas peticiones ciudadanas de volver a Valencia con ocasión de otras programaciones culturales que se puedan realizar, generando ilusión y satisfacción por el trabajo del bien hecho.