Éxito de participación en la décima edición de l’Escaldà de Jesús Pobre
En la resaca de la festa de l´escaldà, esbozamos una sonrisa de satisfacción de la gran jornada que vivió Jesús Pobre en el día de ayer. L´Escaldà, contaba este año con el primer aniversario de su declaración con bien de interés cultural inmaterial del patrimonio valenciano, que certifica su riqueza como usos y costumbres y el alto interés cultural, así como una fecha perfecta antes del fin del verano en la que residentes y visitantes podían curiosear y acercarse a conocer nuestras raices más profundas.
Que Jesús Pobre abandere 10 años la recuperación y difusión de esta tradición obedece a la voluntad de todo un pueblo: la asociación de vecinos y vecinas manteniendo este rito ancestral, así como los restantes colectivos que se suman formando comunidad, una alma colectiva orgullosa de su pasado y su cultura agrícola, paisagística, monumental y rural: las mujeres haciendo llata, el del taller de cañizos, la degustación y venta de moscatel y pasas, la didáctica de la bodega Les Freses sobre el moscatel y la elaboración de vinos singulares cuya trayectoria dará que hablar y sobre la que el empresariado de la comarca debiera tomar nota, o este año con la maestria de Gelart, que nos ha traido un helado de moscatel de Jesús Pobre que quitaba el sentido llegando a consumirse 100 litros y 987 tarrinas de degustación, y que nos debe hacer reflexionar sobre este producto autóctono y sus posibilidades, así como el grup de danses de Jesús Pobre diversificando la oferta a golpe de dolçaina y postizas, y la barra de festeros 2020 que atendieron con almuerzos y picaetes casolanes a las centenares de personas que no quisieron perderse esta jornada festiva, que se prolongó en los bares y restaurantes en los que con cariño, elaboraron menús especiales de l´Escaldà, donde no faltaron las pasas y mistelas, y que ponen el acento en repensar que ofertas gastronómicas debemos ofrecer desde la proximidad, revitalizando nuestro sector primario por encima de modas o platos impostados.
Autenticidad ha sido el paraguas de la festa de L ´Escaldà, con la ilusión y el trabajo colectivo como denominador común con la que cada año nos contagiamos por encima de la mera promoción. Esa es la fórmula, que cuenta con el apoyo institucional tan necesario desde la Eatim de Jesús Pobre, apostando siempre por la cultura, usos y tradiciones, y las buenas prácticas como base para generar nuevas oportunidades, y que precisa urgente del relevo generacional.