Amarga derrota del CFS Dianense 3-2 en el mejor partido a domicilio de los dianenses
El C.F.S Dinanense no consiguió la victoria en el desplazamiento de este sábado a Novelda, donde se enfrentó al C.F.S: María Magdalena, a pesar de realizar uno de los mejores partidos a domicilio de la temporada.
Y eso que conjunto de Luismi Bonet, volvía a encajar en los primeros minutos del partido un gol en contra. Pero esta vez, en lugar de venirse abajo, los jugadores dieron un paso al frente y de la mano de Jordi y Mateu que estuvieron magníficos todo el partido, le dieron la vuelta al marcador. Primero con un doble penalti ejecutado por Jordi a falta de tres minutos para el descanso, y posteriormente por Mateu ya en la reanudación, con una genialidad que dejo a varios rivales sentados empujando el balón al fondo de la red. Transcurría el minuto 32 del partido.
El equipo dianense continuaba mandando en la pista y no permitía prácticamente ninguna ocasión de peligro a los locales, que veían como la circulación de balón de los azulones no les permitía crear peligro.
A falta de 5 minutos, y en lugar de buscar el tercero, al equipo dio un paso atrás para conservar el resultado. Un error que los jugadores de Santa María, con más experiencia en la categoría que los dianenses, no perdonaron. En el primer fallo en defensa de todo el partido, los locales conseguían el empate, y dos minutos después, y viendo el estado anímico de los de Luismi Bonet tocado, conseguían el tercer y definitivo gol que cerraba el partido.
Una pena este resultado, viendo lo apretada de la clasificación y que los rivales directos al ascenso también pincharon en sus partidos. También las bajas de algunos jugadores con experiencia en categorías superiores como Roque o Borja, se notaron al final del partido, además de contar con jugadores tan importantes con Igor, jugando con molestias o Pauet, en el proceso final de recuperación.
Una semana de descanso que vendrá bien a los jugadores para recuperarse tanto física como moralmente del duro palo recibido en Novelda. A partir de ahí, tres partidos consecutivos en casa que deben de convertir el pabellón de Dénia en una olla a presión.