Opinión Rafael C. de Bustamante (CS Dénia): A la derecha de ciudadanos
La posición de Ciudadanos permite contemplar la política desde una posición de privilegio, la del centro liberal. No tenemos más líneas rojas que las que nacen del sentido común.
Con estos principios, miramos a nuestra derecha y nos encontramos con dos variantes del mismo estilo político. Los azules y los verdes. A fin de cuentas el verde no es más que azul mezclado con amarillo. Todos sabemos lo que significa el amarillo.
Mirando a nivel nacional vemos a un PP que está viviendo una vuelta a las viejas costumbres, veremos si también a las corruptelas que les tienen aún peregrinando por los tribunales. Incluso vemos una resurrección de viejos cuadros dirigentes después de pasar por chapa y pintura con mayor o menor éxito. Convencidos de que Sánchez ya se ocupa de aniquilar las posibilidades de la izquierda, centran todos sus esfuerzos en intentar borrar del mapa a Ciudadanos, ofreciendo todo tipo de cargos y prebendas a sus representantes siempre que abandonen dando un portazo lo más fuerte posible y en el momento que se lo indiquen. Así están volviendo al redil en realidad todos aquellos que lo abandonaron sin rubor cuando lo naranja era trending topic y que ahora vuelven al calorcito de lo viejo y conocido. Es la filosofía de la ética variable, del todo vale si la bolsa es buena. Pero tenemos que comunicarles que cada día les estamos más agradecidos por sacar la basura por nosotros. El talento sigue siendo naranja.
El ámbito local no resulta ajeno a todo esto. En Ciudadanos nos hemos vuelto expertos en escuchar propuestas de absorción con todo el muestrario de argumentarios, desde la sentimental complaciente del tipo “es que sería una pena que tanto talento como tenéis se perdiera”, pasando por el ofrecimiento de cargos y puestos en lista, hasta el ninguneo despechado cuando no reaccionamos como esperan. Me pregunto qué pensarán sus propios cargos y afiliados al ver esta subasta. Da la sensación de que no les entra en la cabeza que alguien esté en política sin buscar un interés, lucro o poder. Probablemente les rechina tanto porque pone en evidencia lo perverso y deforme de su forma de hacer política, somos un espejo incómodo.
Les vemos lanzándonos su campaña mediática hiperventilada y vacía de mensaje real, una práctica habitual en el bipartidismo que acaba provocando el hastío y desapego de la política que vemos en gran parte de la ciudadanía. Puede que tanto al PP como al PSOE les convenga que la gente se desentienda y les deje manos libres para perpetuarse como políticos de poltrona, pero es hora de que los votantes tomemos el control del gobierno de nuestras ciudades, es hora de que la política vuelva a ser útil y cercana. Los circos mediáticos mejor que se queden al otro lado del Atlántico.
En el caso de VOX, no hay miedo de que sean un espejo incómodo para el PP. No es el caso, ni tampoco su objetivo. Mantienen una presencia a nivel nacional que no acaba de verse reflejada a nivel local. Probablemente sea por lo complicado que resulta defender desinteresadamente y cara a cara unos postulados tan escasos y populistas. Desde luego que siempre ha habido público para los extremos. Así que conviviremos con ello.
Rafael C. de Bustamante, coordinador de CS Dénia