Bernat Cardona dona al Arxiu de Dénia un conjunto de miniaturas hechas por su abuelo durante su encarcelamiento en Alicante después de la guerra
Al acabar la Guerra Civil, el dianense José Bañó, afiliado a la CNT, fue represaliado por el franquismo y condenado a 7 años de prisión en el reformatorio de adultos de Alicante. Allí debió coincidir con otros muchos dianenses que corrieron la misma desdicha, como Gabriel Pérez, Antonio Ballester, Jaime Fornés o Francisco Blanquer, así como con los 19 prisioneros de Dénia que fueron fusilados en esta cárcel.
Durante su estancia en prisión, Bañó dedicó parte de su tiempo a hacer manualidades destinadas a su hija, María Bañó. Se trata de objetos elaborados con pequeños trozos de madera que cortaba con una navaja o con tiras de piel. Algunos de ellos llevan grabadas las iniciales de su destinataria, M.B.
Ese legado, que la familia ha atesorado durante años como un recuerdo preciado, ha sido donado por el hijo de María, Bernat Cardona Bañó, al Ajuntament de Dénia para que se incorpore al conjunto de materiales vinculados a la Guerra Civil y la represión franquista que custodia el Arxiu Histórico Municipal.
Los objetos dados son una cajita fabricada con tiras de piel de colores, un pequeño avión sujeto a un imperdible para prenderlo en la ropa, un anillo, zuecos de madera, unos zapatitos de tacón y dos cestas.
Este conjunto se pudo ver en 2018 en la exposición Dénia, temps de guerra i repressió, 1936-1939 organizada por el Arxiu Municipal en el Centre d’Art l’Estació, cedido por la familia para la ocasión.
José Bañó fue enviado a casa antes de acabar la condena, “a los 4 o 5 años de haber sido encerrado en la prisión”, por padecer tuberculosis, explica su nieto. Una enfermedad que contrajo por las pésimas condiciones del encierro y que le ocasionaría la muerte en 1955.
Ahora, gracias a la iniciativa de la familia, los objetos que con tanto aprecio José Bañó creó pensando en su hija quedarán siempre en el recuerdo de la ciudad y serán conservados como testigos de la historia.