Dénia presenta su Plan municipal de prevención de adicciones para los próximos cuatro años
El Ajuntament de Dénia ha presentado hoy el Plan municipal de prevención de adicciones para el periodo 2024-2028, una hoja de ruta con cuatro ámbitos de intervención y 78 acciones cuyo objetivo último es “mejorar la protección de la salud de nuestros menores”, según ha indicado la concejala de Bienestar Social, Melani Ivars.
Un plan, ha añadido la concejala, “ajustado a la realidad y a las necesidades actuales del municipio, detectadas tras el análisis de los datos obtenidos en la encuesta realizada a la población escolar de 14 a 18 años de Dénia, a través del trabajo realizado por la UPCCA a lo largo de más de 25 años de servicio y también en la evaluación de las acciones del anterior plan que se han ido desarrollando en los últimos cuatro años”.
El plan ha sido elaborado por el personal técnico de la Unidad de Prevención Comunitaria en Conductas Adictivas (UPCCA) del Ajuntament de Dénia con el soporte técnico de la empresa E-Value, dedicada al desarrollo integral de proyectos de sensibilización social y educativa. Encarna Cáceres, técnica de la UPCCA y Julia Aguilar, profesional de E-Value, han sido las encargadas de desgranar los aspectos principales del documento de referencia ante representantes de entidades sociales, empresariales y festivas, miembros de las policías nacional y local, autoridades, personal de dirección y orientación de los centros educativos y representantes de otras áreas relacionadas con la prevención de adicciones.
La encuesta
El Plan municipal de prevención de adicciones parte de dos ejes de evaluación: los datos sobre consumos y contextos de consumo extraídos de la encuesta en la que ha participado una muestra de 350 estudiantes de 14 a 18 años y, por otra parte, el análisis de qué se ha hecho desde la UPCCA y cómo ha funcionado hasta el momento.
La encuesta entre la población adolescente y juvenil desvela que Dénia está por debajo de la media nacional en cuanto a consumo de alcohol en esta franja de edad, aunque existe un índice de consumo que hace necesario continuar con la labor de prevención. Dos datos que han llamado la atención de las analistas y sobre los que es necesario actuar son la tolerancia en el ámbito familiar, que facilita y/o promueve los primeros consumos (a los 13-14 años en el caso de la juventud dianense) y la necesidad de incidir en patrones de riesgo específicos, como el “consumo de atracón” (binge drinking) o lo que es lo mismo, la ingesta elevada de alcohol en un periodo muy corto de tiempo.
En cuanto al consumo de tabaco, los datos indican que el consumo medio de tabaco tradicional en la población dianense de 14 a 18 años “es muy inferior a la media nacional”, pero se registra un aumento del consumo de vapeadores, tanto con nicotina como sin, y hay que ajustar la prevención en este ámbito ya que ambas opciones generan dependencia.
En consumo de cannabis, las prevalencias de consumo de la juventud de Dénia son también menores que las nacionales, “aunque no vemos tanta diferencia como en los casos del alcohol y el tabaco”. Un dato a tener en cuenta es cierta tendencia a la feminización del consumo de esta sustancia en el municipio, pauta que no se aprecia a nivel nacional.
El cuarto bloque de la encuesta hace referencia a la adicción a las tecnologías y el juego en línea. El consumo medio entre nuestros jóvenes no ha llamado la atención en el análisis de la encuesta, pero sí lo ha hecho el número de horas que pasan con TIC dedicados al ocio, no a fines educativos. Más del 30% de los encuestados supera el número de horas diarias recomendadas frente a las pantallas.
Las expertas consideran que es necesario ofrecer educación tecnológica a la juventud que complemente el trabajo preventivo sobre los riesgos del uso y abuso de las TIC.
Campos de acción
El análisis de estos datos y de información procedente de la UPCCA ha conformado las estrategias y acciones en materia de prevención de adicciones que contiene el plan y que abarcan cuatro ámbitos de intervención.
El educativo, en el que colaborarán la UPCCA junto a la Policía Nacional y los departamentos de orientación de los centros educativos, con dos líneas de acción: una sobre habilidades sociales y otra específica sobre adicciones, para trabajar sobre las TIC, el juego y drogas de abuso.
En el ámbito familiar se van a trabajar directamente los datos de consumo con las familias, exponiendo factores que deben conocer y deben controlar, con especial incidencia a los núcleos familiares con menores en edad de inicio al consumo. El plan recoge también la necesidad de tener mayor acceso a las familias vulnerables del municipio y trabajar con ellas la prevención en grupos educativos reducidos.
En el plano comunitario, se prevén tres proyectos relacionados con campañas generales de sensibilización para toda la población, reforzando aspectos más concretos dirigidos a jóvenes y familias; la prevención ambiental (programa Servicio Responsable con los establecimientos de ocio nocturno, campañas de calle y apoyo al control de la oferta de venta de tabaco y alcohol, trabajando con Seguridad Ciudadana y la Policía Local); y, por último, la prevención selectiva, para llegar a los grupos de riesgo.
El último ámbito de acción de la UPCCA es el laboral, en el que se va a continuar, como hasta ahora, trabajando en el ámbito institucional, con acciones de prevención dirigidas a la plantilla del ayuntamiento; y en colaboración con Creama, ofreciendo formación al alumnado de los programas de cualificación básica.